¿Por qué mis correos llegan como Spam?

Si notas que tus correos llegan a la bandeja de spam de tu destinatario, puede que necesites alguna configuración extra en tu servidor o que estés haciendo un mal uso del correo electrónico.

En la mayoría de los casos que vemos, el problema se da por una incorrecta configuración del servidor de envío. En otras, porque efectivamente estás enviando spam sin saber lo que esto significa. En este artículo te explicamos qué es el Spam.

Ahora bien, si descartamos el envío de correos masivos, existen muchas otras razones por las que tus emails podría estar llegando como spam. Y no necesariamente se relacionan con el uso que estés haciendo de tu cuenta.

Analizando la cantidad de veces que hemos visto este problema, llegamos a la conclusión de que si tus correos legítimos no llegan donde deberían, es muy probable que necesites asistencia de tu proveedor de hosting para que revise la IP del servidor y/o que configure la autenticación de correo.

Estos son los dos problemas que vemos con más frecuencia:

Si la dirección IP del servidor está en una lista negra o se ha identificado previamente como fuente de spam, es muy probable que cualquier mensaje que se envíe desde esa dirección IP sea considerado spam.

Si desde tu mismo servidor se han enviado correos electrónicos no deseados en el pasado, tu correo electrónico puede ser filtrado como spam en el futuro. Los proveedores de correo electrónico utilizan el historial de comportamiento del remitente para determinar si los correos electrónicos entrantes son legítimos o no. Puedes no haber sido tú, ni nadie de tu empresa. Pero si tu servicio de hosting es compartido y tus correos electrónicos se gestionan desde ahí mismo, la IP de envío de tus correos es la misma que las de muchos otros usuarios.

Para evitar este problema deberías elegir un servidor de hosting con mejor reputación o pasarte a una alternativa superadora como la gestión de correos a través de Google o Microsoft.

Las técnicas de autenticación de correo electrónico se utilizan para verificar la identidad del remitente de un correo electrónico y confirmar que el correo electrónico no ha sido modificado durante la transmisión.

Las técnicas de autenticación incluyen el DomainKeys Identified Mail (DKIM), Sender Policy Framework (SPF) y el sistema de autenticación de mensajes basado en dominios (DMARC).

Al usar técnicas de autenticación de correo electrónico, los remitentes legítimos pueden asegurarse de que sus correos electrónicos sean entregados a los destinatarios previstos y que no sean bloqueados por los filtros de correo no deseado. Además, estas técnicas ayudan a proteger a los destinatarios de correo electrónico de fraudes, spam y phishing.

Los proveedores de correo electrónico suelen emplear algoritmos para identificar si el remitente es confiable o no. Si el remitente es desconocido o su dirección de correo electrónico parece sospechosa, el correo electrónico puede terminar en la bandeja de spam.

Si el correo electrónico contiene palabras clave sospechosas, como “gane dinero fácilmente” o “mejore su vida sexual”, es probable que sea filtrado como spam. Los filtros de correo electrónico están diseñados para identificar y bloquear este tipo de mensajes.

El contenido del mensaje también puede afectar si se filtra como spam o no. Por ejemplo, si el mensaje contiene enlaces a sitios web de baja calidad o tiene un formato sospechoso, puede ser bloqueado. Además, los mensajes que contienen archivos adjuntos grandes o ejecutables pueden ser bloqueados por el proveedor de correo electrónico.

La configuración de filtros de correo electrónico del destinatario también puede afectar si un correo electrónico se filtra como spam o no. Si el destinatario tiene configurado un filtro de correo electrónico muy estricto, es más probable que los correos electrónicos legítimos se filtren como spam.

En estos casos lamentablemente ya no depende de ti resolverlo, tus correos pueden ser bienintencionados, pero es necesario que el destinatario confíe en ellos y le avise a su propio servidor que ese correo recibido no es spam.

Los remitentes deben enviar correos electrónicos con moderación y no enviar demasiados correos electrónicos a la vez. Si los remitentes envían correos electrónicos en grandes cantidades o con demasiada frecuencia, los proveedores de correo electrónico pueden considerar que los correos electrónicos son spam.

Tanto tu proveedor de correo electrónico como el de tu destinatario tienen políticas establecidas con respecto a la cantidad y frecuencia diaria de envíos y recepciones permitidas.

Como puedes ver, hay prácticas que dependen de ti y otras que no. Siempre podrás pedir ayuda a tu servidor de correo en los casos que se requieran mayores configuraciones.

En resumen, los proveedores de correo electrónico establecen políticas específicas para determinar si un correo electrónico es legítimo o spam. Los remitentes deben asegurarse de seguir estas políticas y prácticas recomendadas para evitar que sus correos electrónicos sean filtrados como spam y garantizar que lleguen a la bandeja de entrada del destinatario.

Pero, por otro lado, si lo que necesitas es enviar un newsletter o desarrollar una campaña de email marketing, no podrás hacerlo directamente desde tu gestor de correos convencional. Necesitas un servidor de mailing, y contar con tu propia lista de contactos.